jueves, 13 de agosto de 2009

Otro punto de vista

Ha llegado a la cuenta de correo del blog unas reflexiones de alguien que pertenece al grupo de "daños colaterales" por los despidos de Qualytel, y por su interés os las expongo a continuación:



Les escribo para exponer el punto de vista de un afectado indirecto por el Expediente de Regulación de Empleo en la empresa Qualytel. Como pareja de uno de los afectados, he podido seguir todo el largo proceso desde una perspectiva cercana aunque suficientemente distante para evitar el nerviosismo que impide a los afectados muchas veces expresarse como quisieran y que les hace centrarse excesivamente en detalles y experiencias personales que enturbian su mensaje.

Fundamentalmente, me gustaría dirigir mis palabras a varios de los actores implicados.

Empezare por la autoridad laboral, instituciones y partidos políticos. ¿De verdad podemos pensar que Qualytel es una empresa al borde de la quiebra debido a la crisis que nos afecta? ¿Pueden ustedes permitir que todas las subvenciones y ayudas otorgadas no cumplan con sus verdaderos objetivos? ¿Nadie se acuerda ya de las visitas de cargos regionales y nacionales de todos los partidos cacareando y apoyando el “empleo joven” que ofrecía Qualytel?

Es absolutamente manifiesto y obvio que camuflado detrás de este ERE solo hay un propósito de reducción de costes y deslocalización de servicios por parte de Qualytel. Si quedara algo de decencia en ustedes, pedirían el reembolso de toda ayuda y subvención para conseguir una indemnización digna para todos los afectados (actuales, pasados y futuros) … o para subvencionar el empleo joven y estable de verdad. No hablemos ya de que valientemente impidieran esta agresión a 122 personas. Demasiado pedir.

Mientras tanto, sigan peleando por el cambio de nombre de las calles … esa cuestión de vital importancia que les tiene tan preocupados.

En segundo lugar, me gustaría continuar hablando como usuario del servicio de cualquier operador de telefonía e Internet. Y lo hago acusándome de cierta xenofobia, pues reconozco no dispensar de un trato amable hacia cualquier operador de acento sudamericano … aunque podría decir lo mismo de cualquier contestador de autollamada o ante cualquiera de las vulneraciones diarias de la ley de protección de datos.

Señores de Orange, ¿no creen que la deslocalización de sus Call Center no hace sino acrecentar una sensación de absoluta desconfianza del consumidor hacia ustedes? ¿no creen que esto es un factor más para sus fabulosas cifras de los últimos meses? Lamentablemente para ustedes, y junto a otros factores como la falta de formación (profesional y académica) de sus centros de deslocalización; el usuario medio aún valora conceptos como la proximidad, la cercanía, la inexistencia de barreras culturales … y a veces, de vez en cuando, la calidad del servicio de sus agentes españoles.

Señores de Qualytel, mas allá de esta situación, no se olviden de que aun tienen cuentas pendientes … ¿les tengo que recordar su vejatoria política anti-absentismo? ¿hace falta recordar las lamentables condiciones del equipamiento que disfrutan sus trabajadores? ¿les recuerdo su reiterado incumplimiento en la aplicación del convenio colectivo que parece no aplicarles? Aunque algunos trabajadores se olvidaran del paso por su empresa lo mas rápidamente posible … no esperen perder de vista a los demás tan fácilmente. Después de tanto tiempo de agonía, rumores y falta de información … todavía os intentaremos dar una coz, sanguijuelas.

Ahora, turno para los representantes de los trabajadores. Para esos que sostienen tener la conciencia tranquila. A esos a los que debemos agradecer que hayan conseguido esos 25 días por año trabajado “porque el sector del telemarketing es así y no se podía hacer nada más”. Para esos que escondidos en su inmunidad sindical son el elemento más extraño e irreconocible del puzzle. Para esos que han olvidado de que lado están y no recuerdan como sus “antepasados” consiguieron los derechos que inmerecidamente disfrutan. Para esos que no dudaran en ensuciar haciendo suyas las palabras de Dolores, Pablo, Karl, Ernesto y tantos otros cada 1 de Mayo. Y si no os gusta el sindicalismo “de póster y libro” … para esos que han olvidado la sangre de los mineros vascos y asturianos, la quema de máquinas de los ingleses y la lucha de esos millones de trabajadores anónimos que durante siglos han peleado por vuestros derechos … si, esos que decís representar. Para esos que han olvidado que la lucha obrera es la reacción espontánea y solidaria de los trabajadores ante la injusticia. Para esos que ahora solo utilizan su sillón de sindicalista para salvar su propia cabeza. Para vosotros que habéis olvidado esos ideales que alguna vez tuvisteis. Perdón, nunca fueron vuestros ¡¡¡que inocente!!!

Para vosotros, mi más absoluto desprecio. ¿Por qué no renunciáis a vuestra inmunidad y os ponéis los primeros en la lista? ¿Por qué no abandonáis “el Dios (Qualytel) proveerá” y lucháis para que este ERE sea el último? ¿Por qué la conformidad desde el minuto uno? ¿Cuáles son vuestros verdaderos intereses? ¿De verdad tenéis la conciencia tranquila? Gracias, “compañer@s”, seguid así … somos tan tontos que nos volveréis a engañar con vuestra palabrería barata.

A los trabajadores de Qualytel, simplemente deciros que no dejéis que sindicatos, ni partidos, ni el conformismo charro os arrastren. No dejéis que nadie hable por vosotros, ni siquiera yo. Organizaros, tratad de olvidar el drama de cada uno y luchad porque se os oiga … será demasiado tarde para vosotros mismos, pero vivir con el convencimiento de que la próxima vez no lo tendrán tan fácil.

Y por último, me gustaría dirigirme al resto de salmantinos. ¿Hasta cuando vamos a esperar como corderos que nos lleven al matadero? ¿Hasta cuando la pasividad? ¿Qué hace falta para que nos quitemos el gotero de suavizante que nos ha puesto “el estado del bienestar”? ¿Hasta cuando estaremos dispuestos a que pisen a nuestros hijos, hermanos y parejas? ¿Por qué debemos aceptar estoicamente el chaparrón? ¿Cuántas veces nos perderemos en reivindicaciones estúpidas? ¿Habrá algo que os levante del sillón? ¿Acaso no habéis visto nada?

Permitidme que me incluya como un salmantino mas … al final, soy tan reaccionario, cobarde y pasivo como vosotros. De vez en cuando salgo del letargo y pego algún “bocao” de perro rabioso, pero se me pasara. También se me olvidara el verdadero significado de las palabras que he usado y Ernesto y tantos otros volverán a ser un póster en mi habitación o un libro en una estantería. Se me pasara el ataque de vergüenza ajena, de creer que alguien escucha ahí fuera, de que algo puede cambiar … y volveré a echarme la siesta en mi sofá. Y las depresiones, enfermedades y amarguras de la gente a la que quiero, serán (espero) solo un mal recuerdo.

Fdo.: Afectado de rebote


5 comentarios:

  1. Bravo.

    Es todo lo que se puede decir a esto.

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  2. literario, directo y profundo;
    me gusta cómo escribes

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  3. Que lean y tomen nota los llamados "sindicalistas".
    La llevamos clara con los actuales "defensores de los trabajadores".

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  4. No necesita más comentarios.

    ¡¡¡BRAVO!!!

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  5. Simplemente perfecto.
    Muchas gracias por el apoyo.

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